En esta ocasión tuve la suerte de que Melisa y Emilio se cruzaran en mi camino para hacer una preciosa sesión de pareja en la playa, la zona de las salinas de Santa Pola dio mucho juego. Un cielo nublado y una temperatura perfecta fueron la guinda para que se dejaran llevar delante de la cámara.
Fue también una sesión muy especial porque están esperando su segundo hijo, Melisa radiante y dispuesta a todo no dejaba de sonreír con todo el cariño y amor del mundo a Emilio, mientras él la mira de esa forma especial en la que se miran las parejas que están hechas el uno para el otro.
Y me encanta tener personas así delante de la cámara, me encanta veros a vosotros y vuestra esencia.
Gracias chicos por una tarde especial y diferente, ¡que seáis muy felices!
Se lo tengo que agradecer también a mi compañero de nuevas aventuras Jose Miguel, ya que sin él no hubiera sido lo mismo.